.

lunes, 22 de marzo de 2010

La antesala del "Proceso de Reorganización Nacional"

War on Democracy Dirigido por John Pilger y Christopher Martin

John Pilger y Christopher Martin y ganador del premio One World Media Awards 2008, que galardona el uso efectivo de los medios a la hora de comunicar los aspectos sociales, políticos y culturales del mundo, este documental contiene un gran archivo gráfico y testimonios profundos que explican la situación que han vivido y viven Centroamérica y América del Sur.

Hidden in Plain Sight Dirección y guión: John H. Smihula

Profesor de literatura, composición y vídeo de la Universidad de Nevada (Estados Unidos), con la colaboración de la organización SOA Watch, este documental trata la naturaleza de la política estadounidense a través del prisma de la Escuela de las Américas, un centro situado en Panamá donde altos jefes del Ejército de Estados Unidos adiestraron a más de 60.000 soldados y policías de Centroamérica y Suramérica en prácticas de combate y tortura.

Una interpretación interesante del golpe a nivel local

Si tenemos que responder el por que del golpe de estado de 1976, la documentación existente nos impide seguir diciendo que fue para evitar un triunfo del inmundo trapo rojo. Veremos entonces quien organizó el fragote y sus motivos.
Los grupos económicos que conformaron el núcleo de la conspiración estaban representados por tres sectores: el sector agropecuario, fundamentalmente compuesto por la SRA; el sector financiero, cuya cabeza visible era la Asociación de Bancos Argentinos (ADEBA) y finalmente estarán los miembros de la patria contratista encuadrados en la Unión Industrial Argentina (UIA). A pesar de la diversidad de intereses que poseían, los grupos económicos que apoyaron el golpe militar tenían en común la convicción de que en Argentina se desarrolló un capitalismo tortuoso (Canitrot, Adolfo, Teoría y práctica del liberalismo en Desarrollo Económico, 1981, pág. 82) consistente en una mezcla de capitalistas débiles y sindicalistas fuertes.

Tras el golpe de estado, la SRA se quedó con la Secretaría de Ganadería y logrará la derogación de la ley 21251/75, evitando al sector el pago de ingresos brutos provinciales. Un aumento del 72% en los precios de la producción animal en 1976 define la política hacia el sector emprendida por Martínez de Hoz en consonancia con lo expuesto por Celedonio Pereda –presidente de la SRA-: "...llena de asombro que ciertos grupos pequeños pero activos sigan insistiendo en que los alimentos deben ser baratos..." (La Nación 06.06.1976).

ADEBA -que reúne la banca privada nacional y extranjera- reclama y obtiene como botín el Banco Central de la República Argentina (BCRA). Su titular, Narciso Ocampo, sostuvo ante la asamblea de gobernadores del Banco Interamericano de Desarrollo que: "...la intervención de las Fuerzas Armadas el 24 de marzo de 1976 pone fin a un período histórico argentino, se abre así una etapa de promisorias perspectivas ya que, cualquiera sea su evolución y resultados finales, el solo hecho de que se apunte al ordenamiento social y económico y se restituya el principio de autoridad, constituye un vuelco indiscutiblemente positivo..." (ADEBA - Memoria 1975-1976, Buenos Aires, 1976, pág. 8).

La Asamblea Permanente de Grupos Empresariales (APEGE) –formada en 1975 para contrarrestar a la Confederación General Económica (CGE) que apoyó el proyecto nacional de Perón- tenía entre sus miembros a la Unión Industrial Argentina (Jorge Aguado), la Cámara Argentina de Comercio (Armando Braun), la Cámara Argentina de la Mediana Empresa –CAME- (Osvaldo Cornide), la Sociedad Rural (Celedonio Pereda), la Cámara Argentina de la Construcción (César Polledo, Roberto Meoli), la Cámara de Sociedades Anónimas (Federico Peña) y la Cámara de Grandes Tiendas (Juan Sabaté), organiza el 16 de febrero de 1976 un lock-out patronal, los apagones y el cierre premeditado de negocios como parte de una estrategia donde izquierda y derecha eran funcionales en la preparación del golpe de estado . Su accionar junto al de algunos medios de comunicación buscó precipitar un estado de ánimo colectivo –particularmente de la clase media- a favor de un cambio de gobierno, por el «caos» reinante. Como resultado de ello y tras el golpe, la CGE es disuelta por medio del decreto 21.599/77, mientras que el resto de las organizaciones empresariales continúan su funcionamiento institucional.

La suciedad de esa supuesta guerra está en los verdaderos motivos por los cuales se hizo el golpe de estado, a lo que no es ajeno que el 53.8% de los desaparecidos sean trabajadores, muchos de los cuales eran dirigentes sindicales; que a los dirigentes peronistas se los encarceló en barcos y cárceles en condiciones indignas e injustas; que las acciones durante todo el proceso dictatorial fueran llevadas adelante por el Movimiento Obrero Organizado; que cuando hay que denunciar las desapariciones son dirigentes peronistas que solo acompañados por las madres de los desaparecidos, marchan hacia la Comisión de DD. HH. de la OEA para hacerlo.

Decía el novelista alemán Ernst von Salomón: la verdad cobra venganza. Es bueno que dejemos entonces de "comer vidrio" y comencemos a colocarnos más allá de Verbitsky y Pando, para develar la verdad… que sólo se explica cuando contestamos ¿quién? ¿por qué? ¿a quién benefició?

Fuente: http://www.elescarmiento.com.ar/11politica1.php

No hay comentarios: