Publicado por La Nota Digital en 11 Junio 2010
Análisis de las respuestas del gobernador Hermes Binner sobre el uso de los agroquímicos en la provincia de Santa Fe. El gobernador niega una audiencia a organizaciones sociales y ambientales que quieren entregarle un petitorio para tratar el tema agrotóxicos con el respaldo de 12.000 firmas.
“Pareciera ser que es la manera que tiene el gobernador de responderle a las organizaciones de la sociedad civil que desde hace un mes le están pidiendo una audiencia para entregarle un petitorio con el respaldo de 12.000 firmas (sí, doce mil firmas). El objetivo es que se extienda al resto del territorio provincial el fallo de la Sala 2da. de la Cámara Civil y Comercial de Santa Fe, de diciembre de 2009, que confirmó la suspensión de las fumigaciones por seis meses a una distancia del límite de los ejidos urbanos de 800 mts. para aspersiones terrestres y 1500 mts. para aspersiones aéreas en el barrio Urquiza de la localidad de San Jorge”, dice el firmante de la nota, Carlos Lowy.
Dice el gobernador en la nota del domingo 6 de junio en el suplemento Rosario 12 del matutino Página 12, nota de José Maggi (entre comillas):
“…tenemos buenas leyes y muchas dificultades para hacerlas cumplir…”
Una ley que no se cumple o no es una buena ley, o no tiene los mecanismos de fiscalización y control necesarios para hacerla cumplir. Y esos mecanismos dependen del ejecutivo, en este caso, del Gobernador Binner. Es decir o no tenemos buenas leyes que regulen el uso de los agroquímicos, o el gobernador no está cumpliendo con los deberes inherentes a su cargo.
“…venimos de tiempos en que se usaban los organoclorados y nos enteramos que se podía vender pero no usar, luego vinieron los organofosforados que se degrada en el ambiente.”
Aquí el gobernador pareciera ser que está absolutamente desinformado, o falta a la verdad: muchos informes muestran que los organoclorados y los organofosforados se siguen usando, entre otros motivos porque el ejecutivo no ejerce los controles que son de su incumbencia exclusiva en el territorio provincial.
“Y luego tenemos el que se asocia directamente con la soja transgénica y la siembra directa que es el glifosato, que está absolutamente en estudio, y que en general no hay manifestaciones demostrables en contra de la salud del hombre si se usa en la forma que plantea en la ley, tanto en la fumigación aérea como en la terrestre”.
Es cierto, el glifosato, como mayoría de los agroquímicos, están “absolutamente en estudio”; lo que significa que no se conocen todos los daños que pueden producir. Y es por eso mismo que se deben alejar todas las fumigaciones de los lugares donde vive la gente.
“la mayor responsabilidad es de los que aplican estos elementos”
Es decir, le está echado la culpa, eventualmente, al peón del campo que hace las aplicaciones.
“…ese trípode (soja transgénica, siembra directa y glifosato) bien utilizado es uno de los fundamentos extraordinarios para la preservación del medio ambiente. Por un lado, porque se han disminuído notablemente los laboreos en el campo, con lo cual se gastan menos combustibles fósiles…”
Link En este revelador artículo firmado por el periodista Horacio Verbitsky se describen las vinculaciones entre la multinacional Monsanto, Felipe (hacerse el boludo) Solá y el Director del Suplemento Rural de Clarín Héctor Huergo. Imperdibles párrafos.
Esto ya es directamente suscribir de manera acrítica el discurso falseador de la realidad de las empresas que comercializan los insumos que participan de la cadena de la soja. En las casi 20 millones de hectáreas de soja transgénica que hay en el país, no hay biodiversidad, desapareció el ecosistema, no hay vida, todo es muerte; salvo, claro, la soja transgénica y las malezas que van siendo cada vez más resistentes. No hay microflora ni microfauna, no hay gusanos ni insectos, no hay mamíferos, aves ni peces. Desapareció todo vestigio de vida ecosistémica.
“…y por otro lado utilizados en la forma que hoy los estudios científicos lo indican , han aumentado enormemente la productividad y la riqueza de nuestro país”.
No; no aumentó la riqueza del país; el país perdió o está perdiendo la productividad sostenible de sus ecosistemas más productivos en forma acelerada. Los que se enriquecieron fueron los dueños de los campos, las empresas comercializadoras de los insumos del paquete tecnológico transgénico para agroquímicos, y las comercializadoras de los granos.
Señores, sepan hacer la diferencia entre "partido político" e "ideología política". Binner es socialista y parte de la Monsantocracia. No hay que confundir las ideas con una lucha puntual a la que para darle fuerza necesita la unión de los sectores mas alla de la discrepancia ideologica. Entonces. ...apoyemos que se deje de usar veneno para la tierra sobre la gente, ya venga ese veneno del campo o de las industrias, por eso reclamemos que el gobierno Provincial y Nacional (Congreso y Presidencia), ponga reglas claras al respecto, si se permite usar veneno contaminante sobre las poblaciones cercanas a las tierras de siembra, es claro que quien pueda lo va a usar para maximizar ganancias.
Suspensión inmediata de las fumigaciones en adyacencias de la zona urbana debido al alto grado de toxicidad y sus nefastas consecuencias sobre la salud del hombre, los animales y vegetales”.
Los estudios que respaldarían tal medida no serían pocas: “...Un estudio del Ministerio de Salud de la Nación; una investigación de la Universidad Nacional del Litoral; un documento de la Jefatura de Gabinete de la Nación; un estudio multidisciplinario llevado adelante por el Centro de Investigaciones en Biodiversidad y Ambiente (Ecosur), el Hospital Italiano Garibaldi de Rosario, la Universidad Nacional de Rosario, el INTA, el Colegio de Ingenieros Agrónomos y la Federación Agraria Argentina; un estudio realizado por Raúl Montenegro –presidente de FUNAM– y un pedido de la Cámara de Diputados de Santa Fe al Poder Ejecutivo para la recategorización del glifosato”. Link
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