Presentaron en sociedad el interbloque agropecuario. Son 92 legisladores que impulsarán proyectos de ley para el sector rural. Por: Matías Longoni
La oposición cierra filas para impulsar leyes para el campo.(Clarín).
Hubo y un antes y un después de las retenciones móviles. En la primera mitad de 2008,el antes, la Cámara de Diputados discutió solo tres proyectos de ley vinculados al campo. Y en el segundo semestre, el después, ninguno. Los partidos de la oposición cerraron fijas ayer con ánimo de revertir tan pobre resultado. Lanzaron un interbloque agropecuario que reunirá en total a 92 legisladores.
El macrista PRO, la Coalición Cívica, la UCR, el Partido Socialista, los díscolos peronistas alineados o con Felipe Solá o con los hermanos Rodríguez Saá, algunos partidos provinciales. Todos esos bloques parlamentarios --quince en total-- prometieron ayer consensuar primero una serie de proyectos vinculados al agro para luego impulsar su tratamiento en la Cámara baja. La iniciativa emula a la Bancada Rural que funciona en Brasil desde hace tiempo, un bloque de 200 legisladores que impone sus recetas cuando se trata de asuntos vinculados al sector.
Aquí, los matices ideológicos en tan variado bloque obligaron a revisar el nombre de la bancada: se optó por quitar la denominación "rural" para evitar ligazones con lo más rancio de la dirigencia del sector. Se la denominó Mesa de Consenso Parlamentario Agropecuario. Esto no pareció importar ni al vicepresidente de la Sociedad Rural, Alejandro Delfino, ni al titular de CARBAP, Pedro Apaolaza, que aplaudieron con ganas la firma del acuerdo interbloques.
Hay que poner la movida en contexto: desde aquella madrugada del 17 de julio en que la Resolución 125 que impulsaba el kirchnerismo en el Congreso, el Gobierno congeló no solo las negociaciones con las entidades rurales sino también todo tipo de discusión parlamentaria, comenzando por el asunto de las retenciones. . La mayoría oficialista --ahora en jaque por el pase de varios diputados al "felipismo"--, paralizó proyectos que ya tenían dictámen positivo, como la Ley de Arrendamientos.
"Este paso es un compromiso con un sector que hoy tiene casi todos los factores en contra y que no tiene diálogo con el Gobierno. Existen diputados que estamos dispuestos a trabajar por el interior del país", explicó Solá. El ex gobernador bonaerense llegó a último momento para bendecir el pacto y estampó su firma en un Manifiesto de diez puntos. Allí figura uno de los temas en los que hay posibilidad de un rápido acuerdo en el arco opositor: que la fijación de las retenciones sea una "potestad indelegable" del Poder Legislativo.
La voz cantante la tendrán los diputados que hoy integran la Comisión de Agricultura. El principal impulsor del bloque agropecuario fue el macrista Christian Gribaudo, actual vicepresidente de esa comisión. Se le sumaron Francisco Ferro (CC), Pedro Morini (UCR) y Lisandro Viale (Socialismo), entre otros. Una vez que acuerden, sus respectivos bloques prometen acompañar con votos cada iniciativa. Pero necesitarán también negociar con el oficialista FpV. "Ojalá estén", dijo Gribaudo.
Fueron estos legisladores los que definieron cinco temas para intentarán conciliar proyectos antes del final del verano: retenciones, ganadería, lechería, regulaciones comerciales (o mejor dicho, el papel de la ONCCA) y economías regionales.
La oposición cierra filas para impulsar leyes para el campo.(Clarín).Hubo y un antes y un después de las retenciones móviles. En la primera mitad de 2008,el antes, la Cámara de Diputados discutió solo tres proyectos de ley vinculados al campo. Y en el segundo semestre, el después, ninguno. Los partidos de la oposición cerraron fijas ayer con ánimo de revertir tan pobre resultado. Lanzaron un interbloque agropecuario que reunirá en total a 92 legisladores.
El macrista PRO, la Coalición Cívica, la UCR, el Partido Socialista, los díscolos peronistas alineados o con Felipe Solá o con los hermanos Rodríguez Saá, algunos partidos provinciales. Todos esos bloques parlamentarios --quince en total-- prometieron ayer consensuar primero una serie de proyectos vinculados al agro para luego impulsar su tratamiento en la Cámara baja. La iniciativa emula a la Bancada Rural que funciona en Brasil desde hace tiempo, un bloque de 200 legisladores que impone sus recetas cuando se trata de asuntos vinculados al sector.
Aquí, los matices ideológicos en tan variado bloque obligaron a revisar el nombre de la bancada: se optó por quitar la denominación "rural" para evitar ligazones con lo más rancio de la dirigencia del sector. Se la denominó Mesa de Consenso Parlamentario Agropecuario. Esto no pareció importar ni al vicepresidente de la Sociedad Rural, Alejandro Delfino, ni al titular de CARBAP, Pedro Apaolaza, que aplaudieron con ganas la firma del acuerdo interbloques.
Hay que poner la movida en contexto: desde aquella madrugada del 17 de julio en que la Resolución 125 que impulsaba el kirchnerismo en el Congreso, el Gobierno congeló no solo las negociaciones con las entidades rurales sino también todo tipo de discusión parlamentaria, comenzando por el asunto de las retenciones. . La mayoría oficialista --ahora en jaque por el pase de varios diputados al "felipismo"--, paralizó proyectos que ya tenían dictámen positivo, como la Ley de Arrendamientos.
"Este paso es un compromiso con un sector que hoy tiene casi todos los factores en contra y que no tiene diálogo con el Gobierno. Existen diputados que estamos dispuestos a trabajar por el interior del país", explicó Solá. El ex gobernador bonaerense llegó a último momento para bendecir el pacto y estampó su firma en un Manifiesto de diez puntos. Allí figura uno de los temas en los que hay posibilidad de un rápido acuerdo en el arco opositor: que la fijación de las retenciones sea una "potestad indelegable" del Poder Legislativo.
La voz cantante la tendrán los diputados que hoy integran la Comisión de Agricultura. El principal impulsor del bloque agropecuario fue el macrista Christian Gribaudo, actual vicepresidente de esa comisión. Se le sumaron Francisco Ferro (CC), Pedro Morini (UCR) y Lisandro Viale (Socialismo), entre otros. Una vez que acuerden, sus respectivos bloques prometen acompañar con votos cada iniciativa. Pero necesitarán también negociar con el oficialista FpV. "Ojalá estén", dijo Gribaudo.
Fueron estos legisladores los que definieron cinco temas para intentarán conciliar proyectos antes del final del verano: retenciones, ganadería, lechería, regulaciones comerciales (o mejor dicho, el papel de la ONCCA) y economías regionales. 
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