-El proyecto oficial de reforma del sistema jubilatorio significa que se acaba la salida que se les ofreció a quienes quieren tener sus ingresos en blanco, pagar sus impuestos y, como premio a ello, obtener una jubilación razonable y no una miserable prestación estatal.
Lo peligroso de la situación es que, evidentemente, el matrimonio gobernante está desesperado por dinero. ¿Son ciertas entonces las sospechas de que otras estadísticas están tan manipuladas como las de inflación, pobreza y producto bruto interno? Los Kirchner se mueven como si no tuvieran muchos caminos para evitar un default que sería un golpe fatal para su administración.
Igual, quedaron en manos del Estado, porque la ley obligó a que la mayor parte de los ahorros depositados en las administradoras de fondos de jubilación y pensión se invirtieran en bonos... del Estado. aportes en la bolsa del default.
Las cuentas capitalizadas invertidas en bonos pasaron a valer menos, pero el Estado autorizó a que se las calculara por un tiempo a ?valores técnicos?. Es decir, como si cada papel cotizara en los mercados al ciento por ciento de su valor.
Pero la quita siguió, porque el propio Estado entregó 35 por cada cien pesos ahorrados a los aportantes y prometió actualizarlos por el llamado coeficiente de estabilización de referencia (CER), un índice que prácticamente coincide con la inflación.
Luego falsificó el CER (mediante la manipulación de las cifras de inflación que mide el increíble Indec) para pagar menos, lo que hizo caer más el valor de los papeles? y de las carteras de inversión en las administradoras.
Morales coincidió con su par socialista Rubén Giustiniani (Santa Fe) en cuanto a su apoyo a la restauración de la jubilación estatal, pero advirtió que respaldarán cualquier iniciativa siempre y cuando se trate de una reforma profunda y seria del sistema previsional.
El socialismo siempre estuvo a favor del sistema de reparto y en contra del negocio financiero, pero también queremos la intangibilidad de los fondos porque de ninguna manera vamos a aceptar que los fondos los use el Gobierno para financiar su política?, afirmó Giustiniani.
-El presidente provisional del Senado, el justicialista bonaerense José Pampuro confió ayer a la agencia Télam que "el bloque oficialista buscará defender el proyecto que se aprobó en la Cámara de Diputados tal cual vino".
"Creemos que se va a aprobar sin modificaciones, en principio, aunque vamos a esperar la discusión", dijo a Télam el senador, quien se mostró "optimista" con respecto a su aprobación en el Senado.
El Presupuesto 2009 prevé un crecimiento del 4 por ciento, un aumento de la recaudación del 5,7 por ciento y una inflación del 8 por ciento anual.
También contempla un dólar estable a 3,19, un superávit fiscal del 3,27 por ciento del Producto Bruto Interno (PBI) y una balanza comercial positiva en casi 12.000 millones de pesos.
La norma estima que el crecimiento del gasto total de la administración nacional ascenderá a 31.600 millones de pesos.
Pampuro señaló que la actual crisis financiera internacional "ya estaba prevista por quienes armaron el proyecto de presupuesto", por lo que consideró que "no hay necesidad de re estudiar toda la iniciativa" tal como plantea la oposición.
El Senado comenzará a discutir hoy el proyecto de ley de presupuesto nacional para el ejercicio 2009, que fue aprobado la semana pasada por la Cámara de Diputados con el voto de la bancada kirchnerista y de algunos bloques aliados. Por lo pronto, la oposición ya anticipó que rechazará la iniciativa, que el oficialismo pretende sancionar sin tocarle una coma.
Es que el texto fue elaborado antes de que estallara la crisis financiera global, cuyas repercusiones ya empiezan a sentirse en la región. "Nuestra idea es que el presupuesto, producto de la crisis internacional, debería ser reformulado", afirmó Rubén Giustiniani (Socialista-Santa Fe)..
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